Cuando era adolescente mis compañeros del instituto me han llamado ...El Pato. Este No se porque y esto era un apodo muy odiado. Además estaban imitando hacia mi los sonidos del Donald Duck. Pensé que lo peor no puede ser más. Por supuesto que era! Este apodo me ha seguido siempre cuando cambiaba la escuela.
He pasado 18 años y ya no me preocupo. La gente que me han llamado El Pato seguramente han olvidado. Pero en contraste - ahora me encantan los patos salvajes. Tienen mucha gracia y presentan un orgullo de si mismos. Nadan mucho, a veces parecen flojas y vuelan poco pero tienen gran potencia de volar. En el cielo son como unos torpedos!
He fotografiado algunos que viven cerca de un gran lago en Alemania.
Aquí pongo la galería de mis fotografías.
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Kwa Kwa Kwa
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